Tensión en el firmamento: en espera del estallido de una nova cercana
Celeste Migdelina Castillo y Luis Ángel Miranda
La comunidad astronómica y astro-aficionados de todo el mundo están en alerta máxima, pues un espectáculo cósmico podría iluminar el cielo nocturno en cualquier momento. La estrella T-CrB ha dado las señales para que tanto profesionales como aficionados se encuentren a la expectativa de un indicio en el firmamento. Desde marzo de 2023, T CrB presentó una reducción significativa de su brillo, algo similar a lo que sucedió la última vez que estalló hace 79 años y que fue el preludio casi un año antes de que se convirtiera en una nova.
La nova recurrente T Coronae Borealis (T CrB), como cuyo nombre lo indica, se encuentra alrededor de la constelación Corona Boreal a unos 3000 años-luz de distancia de nosotros. Se trata de un sistema binario, en donde debido a su gran masa y reducido tamaño, la enorme intensidad del campo gravitacional de una enana blanca absorbe el material de su acompañante gigante roja para depositarlo en su superficie. Eventualmente, el gas alcanza su límite y termina calentándose de forma extrema y suficiente para producir una reacción termonuclear o fusión nuclear enorme, como una bomba al liberar grandes cantidades de energía, produciendo así una emisión inmensa de luz entre ambas estrellas que es precisamente el evento llamado "nova". En base a los registros históricos (ej. 1866 y 1946), sabemos que T CrB repite este proceso cada 80 años, razón por la cual se le llama nova recurrente.
Crédito: Pete Lawrence. Tomado de BBC Sky at Night Magazine.
Se espera que muy pronto seamos capaces de observar el aumento súbito en el brillo de T CrB y que nos permita percibir dicho objeto a simple vista ya que alcanzará un brillo similar al de la estrella Polar por un par de días. Concretamente, tendrá un aumento en su magnitud aparente de 10 a 2, aproximadamente, siendo visible con mayor facilidad en el hemisferio norte y en una parte del hemisferio sur.
Es importante aclarar que una nova no implica la destrucción de la estrella enana blanca, cosa que la distingue de una supernova, en donde esta última es la muerte violenta de una estrella. El término “nova” fue acuñado por Tycho Brahe para describir una “nueva estrella”, es decir, una estrella que no se veía en el cielo y de un día a otro aparecía. Ahora sabemos que lo que Tycho realmente observó era, de hecho, una supernova.
Eventos como este han sido documentados por la humanidad desde hace miles de años y esta no será la excepción. En particular, estos últimos meses, varios grupos de investigación alrededor del mundo han publicado sus predicciones acerca de cuando podría ser el día del estallido. Al principio, se esperaba que fuera a finales de septiembre del 2024, pero ahora se ha estimado nuevas fechas para meses posteriores e incluso para el siguiente año. En el Área de Astronomía de la UNISON daremos seguimiento al brillo de esta nova.
Acerca de los autores:
Celeste Migdelina Castillo Corella y Luis Ángel Miranda Parra son estudiantes de la Licenciatura en Física en el Departamento de Física de la Universidad de Sonora.
Fuentes:
Imagen 1: Ubicación de TCrB en el cielo nocturno. Fuente:
https://www.skyatnightmagazine.com/space-science/t-coronae-borealis-nova.
Información:
https://www.infoespacial.com/texto-diario/mostrar/4872013/mira-hacia-arriba-estrella-
t-crb-estallara-como-nova-recurrente-septiembre
https://www.facebook.com/julio.saucedomorales/videos/890442309663887/?mibextid=
oFDknk&rdid=eOSaYV0erlE9BeLd
https://www.skyatnightmagazine.com/space-science/t-coronae-borealis-nova